martes, 2 de febrero de 2010

A VOCES

Cuando GRITO
es porque ni yo me oigo.

Cuando GRITO
me gusta que mi voz
resuene como un trueno,
cree un eco inexistente,
llegue a tocar el sol,
se expanda con el viento
y no pare de moverse.

Pero ahora, cuando grito,
lo hago casi en silencio
(sólo me interesa una cosa).
Cuando grito sólo quiero
que mi voz llegue a tu boca,
aunque lo intento y no puedo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario